El dinero es una de las mayores fuentes de estrés en las relaciones. La razón principal es que mucha gente tiene problemas para hablar de dinero. Hablar abierta y honestamente sobre el dinero puede reducir el estrés en su relación. También puede generar grandes ahorros cuando usted y su cónyuge están en la misma sintonía. Por lo tanto, las relaciones y el dinero se vinculan directamente entre sí.
Comunique
¿Por qué a la gente le cuesta hablar de finanzas? Algunos de nosotros nos avergonzamos de cuánto gastamos, cuánto debemos o cuánto ganamos. La honestidad es importante en una relación sana. Eso incluye ser honesto acerca de sus finanzas. Las parejas deben comprender la situación financiera de cada integrante. Deudas de tarjetas de crédito. Mal historial crediticio. Bancarrota. Dificultades con la administración del dinero. Todo tiene que estar sobre la mesa para tener una relación sana con su dinero y con los demás.
Estos son algunos consejos para hablar de dinero con su pareja:
- Comprenda sus propias debilidades. ¿Gasta de más en ciertas cosas? ¿Se pones a la defensiva cuando habla de las facturas? Conocer sus propios defectos lo ayuda a tener una mejor relación financiera con su pareja.
- Reserve un día al mes para hablar de dinero. Este es el momento en el que puede hablar sobre los gastos y discutir las metas. Comprométase a no estar en desacuerdo sobre el dinero el resto del mes.
- Sigan aprendiendo sobre el dinero juntos. Al leer libros y ver programas, comienza a educarse mejor sobre las finanzas personales.
Comprenda su personalidad financiera
La forma en que piensa sobre el dinero es única para usted.
Aprendemos actitudes sobre el dinero de nuestras familias y comunidades. Gasto. Ahorro. Deuda. Nos formamos opiniones sobre todas estas cosas a lo largo de muchos años. Y es difícil cambiar esas creencias. Es aún más difícil tratar de cambiar la relación de su pareja con el dinero.
Algunos investigadores describen una serie de categorías al analizar las personalidades del dinero. Una vez más, muchos de nosotros podemos considerar nuestras relaciones familiares con el dinero como la forja de estos estilos monetarios, ya que nuestras familias son nuestra primera ventana en la forma en que aprendemos sobre el dinero.
A modo de ejemplo, algunas de las personalidades monetarias más comunes se dividen en los siguientes grupos:
- Inversores: aquellos interesados en formas estratégicas de ver crecer su dinero
- Ahorradores: aquellos que buscan apuntalar las finanzas por seguridad y reducir el riesgo
- Grandes gastadores: personas con el hábito de hacer grandes gastos
- Deudores: aquellos que tienen un alto nivel de comodidad y hábito de contraer deudas
- Compradores: personas con un gran interés y hábito de comprar, generalmente como entretenimiento
La mayoría de las personas no encajan perfectamente en una categoría. Es fácil ver cómo estos grupos pueden superponerse en rasgos de personalidad cuando se trata de administrar el dinero del hogar.
Saber qué tipo de personalidad monetaria tiene, o al menos los distintos grupos que le son afines, puede ayudarlo a comprender cualquier punto ciego en su relación con el dinero.
Si usted y su pareja son polos opuestos en lo que respecta al dinero, aún es posible vivir juntos felices. Los expertos dicen que las personalidades opuestas con respecto al dinero en realidad pueden equilibrarse entre sí. Los ahorradores mantienen a los derrochadores a raya. Los derrochadores animan a los ahorradores a disfrutar de los frutos de su trabajo. Llegar al punto en el que ambos contribuyan a un enfoque equilibrado implica compromiso.
Cree un sistema para administrar las finanzas
Hay muchos sistemas diferentes para elegir. Compartir cuentas o tener una cuenta conjunta son dos estrategias populares. Tendrá que encontrar lo que funcione para usted. Pero es importante asegurarse de tener un sistema.
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Mantenga cuentas individuales
Una solución que funciona para muchas parejas es tener cuentas separadas. Use la cuenta conjunta para pagar los gastos del hogar. Si le sobra dinero, divida los fondos restantes en cuentas personales. Es a partir de estas cuentas que puede perseguir los objetivos individuales de la lista de deseos. Para un gastador, eso podría significar pagar por unas vacaciones de ensueño. Para un ahorrador, podría significar invertir dinero.
Comparta las tareas de pago de facturas
Uno de los temas que causa problemas es cuando una persona maneja la mayoría de las facturas. Esa persona puede molestarse por estar a cargo. Cuando se trata de facturas mensuales, ambas personas deben conocer los detalles sobre esos pagos importantes.
Establezcan metas juntos
Los expertos coinciden en que las parejas deben establecer metas. Considere hacer listas de deseos separadas y luego clasifique los artículos. Esfuércese por aquellos que ambos sientan que son más importantes. Un objetivo que tienen la mayoría de las parejas es jubilarse cómodamente. Ese objetivo solo puede suceder si ambas personas están de acuerdo en la importancia de ese tema.
Celebre el éxito
¡Está bien sentirse bien con el éxito! Tal vez pagó una tarjeta de crédito o aumentó su cuenta de ahorros. Celebren juntos cuando alcancen su meta. Eso ayudará a mantenerlos a ambos motivados.
