Ahorre dinero planificando las comidas

Los precios están subiendo, y rápido, para productos básicos de uso diario como la comida.  Si le está costando ajustarse a su presupuesto para alimentos, planificar las comidas es una buena forma de asegurarse de que está comprando lo que necesita y de ser lo más eficiente posible.

Aquí hay algunos pasos simples para crear comidas que mantendrán a su familia y a su presupuesto sanos y equilibrados.

Planifique su menú

Piense en los detalles. ¿Qué va a comer para desayunar, almorzar y cenar cada día de la semana? ¿Qué bocadillos necesita tener a mano para sus hijos o para usted? Use sitios web como All Recipes o Food Network para obtener acceso gratuito a recetas sencillas que pueden facilitar la planificación de las comidas.

Enumere los ingredientes y suministros necesarios

¿Qué necesita para preparar su menú? Los ingredientes son los obvios: carne, verduras, cereales, etc. Su lista también puede incluir especias o suministros como toallas de papel, aceite en aerosol o incluso ollas o sartenes.

Recuerde la regla de oro número uno: ¡no haga compras cuando tenga hambre! Cree una lista de la compra y apéguese a ella. Cree una lista de la compra y apéguese a ella.Algunos artículos pueden parecer buenos en el momento, pero al final del día su presupuesto le agradecerá su moderación.

Revise primero la despensa, el refrigerador y el congelador

Antes de ir corriendo a la tienda, revise lo que ya tiene. Hacer un inventario del contenido de la despensa, el refrigerador y el congelador ayuda a que no se desperdicie nada, porque usted utiliza lo que ya tiene (antes de que se eche a perder) y evita compras innecesarias. Planifique su menú para usar primero lo que tenga a mano y compleméntelo con alimentos frescos de la tienda o del mercado.

Defina su presupuesto

¿Cuánto puede gastar? ¿La cantidad es flexible o inmutable? ¿Cómo se asegurará de no excederse en su presupuesto? ¿Pagará con cheque, en efectivo o con tarjeta? Todas estas decisiones deben tomarse antes de comprar.

Ajuste su menú

Ajuste su menú para aprovechar lo que ya tiene y no se salga de su presupuesto. Según el Consejo para la Defensa de los Recursos Naturales, una familia tipo de cuatro miembros tira a la basura $2,275 en comida al año. Puede ahorrar reduciendo el desperdicio de alimentos.

Y, al igual que todos los chefs de restaurantes deberían utilizar tarjetas de costos para gestionar los costos de los ingredientes, usted puede averiguar qué platos son básicos para su familia y qué recetas son caprichos para ocasiones especiales. Algunos ingredientes son más caros que otros. Comprar en temporada, usar cupones y planificar su menú para usar alimentos de bajo costo y fácil disponibilidad son buenas estrategias que puede probar.

Ahora llegó el momento de comprar

Es increíble lo bajo que está esto en la lista, ¿verdad? Hay muchos consejos y trucos de compra que puede utilizar para organizar un viaje de compras óptimo.

Después de comprar: organícese para reducir el desperdicio

La forma en que maneja los alimentos después de llegar a casa es tan importante como la fase de planificación. Recuerde, ¡la comida desperdiciada es dinero desperdiciado! Guarde las cosas de inmediato.

Rote las existencias

Coloque los productos más frescos o más recientes en la parte posterior de su refrigerador/congelador/despensa y los más antiguos en la parte delantera.

Al hacer esto, puede volver a evaluar los productos que tiene. ¿Hay que tirar algo? ¿Qué hay que usar en los próximos días? ¿Qué puede estar pasado de la fecha de vencimiento, pero aún está en buen estado? También lo ayuda a descubrir algunos de los productos que puede haber olvidado en el fondo.

Almacene los alimentos de manera adecuada

Dedique unos minutos más a guardar correctamente los artículos para que se mantengan frescos durante más tiempo. Preste atención a las zonas de su refrigerador y envuelva los alimentos para que duren más.

¡Sigue adelante! Cocine y coma de acuerdo con su plan

Puede ser difícil sentirse inspirado para cocinar después de un largo día. Sin embargo, si lo practica durante un tiempo, puede que descubra que cocinar es una forma relajante de desconectarse. Como todas las cosas, requiere práctica. No se rinda si una receta le sale mal. Tómelo como una lección y vuelva a intentarlo.

Intente cocinar con anticipación

Plantéese cocinar comidas o porciones de comidas con antelación, cuando tenga un día libre. Congele lo que no necesite y disfrute de comidas deliciosas y fáciles durante toda la semana.

Si bien no puede hacer ensaladas de lechuga para toda la semana, los huevos duros se pueden preparar con anticipación y las verduras se pueden limpiar y picar. Dedicar tiempo a la preparación previa puede ahorrarle energía y tiempo a la hora de cocinar todos los días.

Guarde las sobras

Algunas personas cocinan para tener sobras para el almuerzo del día siguiente o la cena de la semana siguiente (o del mes siguiente, si lo congela). Aproveche al máximo su esfuerzo y utilice esas sobras.

Cocine pechugas de pollo o carne extra para hacer sándwiches en el trabajo, por ejemplo.

Utilizar todo lo que tiene hará que coma menos afuera, lo que a veces puede ser la diferencia entre una comida de $4 y una de $12.

Con un poco de planificación, evaluación, compras cuidadosas, preparación y consumo conscientes, puede gastar menos, desperdiciar menos y disfrutar de una alimentación más saludable.

¡Buen provecho!