¿Son las tarjetas prepagadas herramientas efectivas para elaboración de presupuesto?

Como organización nacional sin fines de lucro que guía a las personas hacia la salud y el bienestar financieros, a menudo recibimos preguntas sobre el uso de tarjetas prepagas para ayudar a administrar los presupuestos mensuales.

Compartimos con nuestros clientes que el camino hacia el bienestar financiero es más fácil cuando las personas se toman el tiempo para elaborar un presupuesto. Ese es el mejor lugar para comenzar.

Señalamos los recursos que ofrecemos sobre la "Elaboración de presupuesto 101" y la importancia de preparar un "plan de gastos" simple al analizar los ingresos y gastos mensuales.

Después de elaborar un presupuesto, quedará más claro cuál es la situación financiera específica de una persona. ¿Cuáles son las partidas presupuestarias mensuales? ¿Cuál es el ingreso mensual? ¿Cuánta deuda de consumo debe manejar un hogar? ¿Qué otras deudas debe manejar el hogar? ¿El hogar tiene ahorros para emergencias?

Se debe hacer un seguimiento de todas estas consideraciones para comprender el panorama completo.

Por ejemplo, si es difícil mantenerse al día con los pagos mensuales de tarjetas de crédito de consumo, una buena opción es administrar los gastos mensuales con efectivo, o el equivalente de efectivo, como una tarjeta prepaga.

Una vez más, no hay una "talla única" aquí.

Consideraciones clave sobre el uso de tarjetas de débito prepagas

La idea de usar tarjetas de débito prepagas como una forma de ayudar a mantener un presupuesto depende de la situación individual de cada persona.

Si bien la situación de cada persona es diferente, puede ser útil revisar algunas de las consideraciones clave, como las siguientes:

• Puede ayudar a crear disciplina para la elaboración de presupuestos: podría ser útil asignar una cierta cantidad en un presupuesto para comprar una tarjeta de débito prepaga a principios de mes. La tarjeta no está vinculada a ninguna cuenta corriente existente. Estará al tanto del saldo de la tarjeta después de cada compra, lo que genera disciplina, ya que solo hay una cantidad fija de fondos disponibles. Ya sea que la tarjeta se use para compras inesperadas que surjan o gastos recurrentes, cuando el saldo se agota, no se pueden realizar más compras.
• Ayuda a administrar las compras recurrentes: hemos visto beneficios cuando las personas compran tarjetas de regalo de tiendas cada mes, por ejemplo, en una tienda de comestibles o farmacia que visitan regularmente. De esa manera, pueden presupuestar alimentos o medicamentos mensuales a medida que usan la tarjeta de regalo de la tienda para compras cada mes. Incluso podría ser posible beneficiarse de "puntos de comprador frecuente" al comprar tarjetas de regalo para ganar puntos o futuros descuentos en una tienda favorita.
• Ofrece seguridad: las tarjetas prepagas pueden ser una mejor alternativa al efectivo por razones de seguridad. Por ejemplo, con algunas tarjetas, es más fácil realizar un seguimiento de las compras a medida que se producen. Algunas tarjetas ofrecen protección contra fraudes, y alentamos a las personas a averiguar si se ofrece ese beneficio. Además, les recordamos a las personas que se aseguren de que los fondos precargados estén asegurados por la FDIC, lo cual está disponible con algunas tarjetas.
• Ofrece opciones, varias estructuras de tarifas: alentamos a las personas a que se tomen el tiempo para comprender cómo comprar y usar una tarjeta prepaga. Por lo general, el titular de la tarjeta carga los fondos que desea gastar en la tarjeta. Algunas tarjetas requieren una tarifa de activación, por lo que recomendamos a las personas que obtengan toda la información sobre las tarifas para que no haya sorpresas. Como señalamos, una tarjeta prepaga funciona de manera muy similar a una tarjeta de débito en el sentido de que se puede usar en tiendas minoristas. Además, es importante saber si la tarjeta se puede usar para retirar fondos de un cajero automático, lo que puede ser útil, especialmente cuando se viaja. Una buena manera de entender todas las opciones es probar el uso de una sola tarjeta prepaga para poner en marcha el proceso de seguimiento y gestión de los gastos.

Comience con un presupuesto

En definitiva, las tarjetas prepagas pueden ser una opción para ayudar a las personas a establecer hábitos efectivos de administración del dinero. Pero, como hemos señalado, la situación financiera de cada persona es diferente.

Ya sea que las tarjetas prepagas sean útiles o no, comprender el panorama completo de la situación financiera de una persona es el mejor enfoque.

Sugerimos que lo primero que hay que hacer es comprender la situación financiera general de un hogar para poner el dinero a trabajar para lograr objetivos más grandes. Para empezar, esta sencilla hoja de trabajo puede ayudar a las personas a hacerse una idea de lo que tienen para gastar, cuáles son sus compromisos y lo que les queda para dedicar a sus objetivos.

¿Necesita más ayuda?

Nuestros consejeros certificados por la NFCC le ayudan a iniciar una conversación sobre dónde se encuentra hoy y qué necesita para lograr sus objetivos.

Lo guiamos a través de un proceso para evaluar su situación financiera, comprender sus objetivos y crear un plan de acción para trabajar hacia ellos.

Lo escuchamos con respeto y le ofrecemos consejos e información que podrían ayudarlo a cubrir sus necesidades.